Buen juego, escasa ventaja

Un Real Valladolid muy distinto al que venía saliendo en Liga supera al Mallorca en goles y juego. César Arzo y Diego Costa dejan en ventaja al equipo para la vuelta en el maldito campo de ONO Stadi.

Mendilibar no sorprendió. En el equipo titular que puso en liza ante el Mallorca en los dieciseisavos de final no repitió ningún jugador en relación al partido del Deportivo. Si sorprendió el hecho de que variara un poco el sistema. Un sólo mediocentro dirigía al equipo para ser un conjunto con ideas más ofensivas.

Fabricio debutó, y bien, con el Real Valladolid. Barragán, César Arzo, Baraja y Yuri formaron la defensa y lo hicieron de manera notable. Los cuatro, pero sobre todo los laterales, empezaron flojos el partido pero conforme pasaban los minutos se entonaban y se sumaban al ataque. El gol de Diego Costa viene precedido de un gran pase al hueco de Barragán a Nauzet. El canario tras su fantástico gol al Real Madrid se come el mundo y como bien dijo él esta semana, “hay que aprovechar la racha”.
Por delante de la defensa Pelé, el portugués cumplió con la idea de Mendilibar de dar mayor juego al equipo en terreno rival. Trabajó a destajo. El jugador cedido por el Oporto va jugando más minutos porque asimilados los conceptos del juego del equipo, su calidad y saber estar le otorgan gran ventaja. Por delante del llamado “stopper” una línea de medias puntas que estuvo en constante intercambio durante los 90 minutos. Haris, Bueno, Asier y Héctor Font se movían con libertad para intentar buscar huecos provocados por la defensa e intentar conectar con la referencia arriba, Manucho o Diego Costa, y así terminar la jugada. Buenas sensaciones dejaron los cuatro, porque a pesar de que algunas cosas no salieron todos lucharon y trabajaron el tiempo que estuvieron en el terreno de juego.
Para terminar, en punta de lanza comenzó Manucho pero terminó Diego Costa. El angoleño no tuvo su día, a pesar de luchar todos los balones y recibir más de una decena de faltas, algunas pitadas y otras no, no cumplió con lo solicitado, el gol. Lo que el angoleño buscó y no encontró en 75 minutos si consiguió el brasileño en tan sólo tres. Ya se sabe, cuestión de rachas y confianza.

A pesar de que el resultado puede ser corto y muy peligroso hay que quedarse con la victoria y con que el equipo va a más, que cada día y partido que pasa se ve que el equipo sabe lo que hace, y lo hace bien.

Deja un comentario